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Volvían
de un paseo gélido por la isla de Kodiar, Alaska, en su pequeña
embarcación. En el trayecto sufren un percance y la embarcación se
hundió. Los guardacostas logran salvar a la madre de Missy, de
tres anos y a una prima, pero Missy y el abuelo no aparecían.
Minutos mas tarde, encontraron muerto por hipotermia, al abuelo;
pero no así a la pequeña. Pasaron cuarenta minutos cuando la
encontraron flotando. Le succionaron casi un litro de agua marina
de sus pulmones, aplicaron respiración artificial y asombrosamente
comenzó a respirar por cuenta propia. Fue internada en el hospital
de Anchorange.
La
pequeña Misty que flotaba sin esperanza milagrosamente fue vuelta
a la vida.
Sabe? El
hombre en la actualidad se encuentra vagando en el frío océano de
culpa, ansiedad, pecados, frustraciones, etc. Sin esperanza, sin
horizonte, tratando por sus medios de salvarse, pero no lo ha
logrado.
Hay solo
uno que puede hacerlo, JESUCRISTO. Lea con atención:
“yo he
venido para que tengan una vida y para que la tengan en abundancia”
Juan 10:10b
Usted
puede dejar de vagar en el océano frío de su existencia. Crea en
JESUCRISTO, acéptele como su salvador y tenga vida abundante.
DIOS le
bendiga.
Rev.
Joel Velásquez Peralta
Pastor:
Iglesia Bautista de Roosevelt
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