“Perdónanos, oh DIOS, por olvidarnos de que todo, sí, todo lo que tenemos proviene de Ti.  Que nada hay ni existe si tu bondadosa mano y gran misericordia, no intervinieran”.

“No solo hoy; sino siempre te damos las gracias, nosotros los que disfrutamos de tu perdón y de tu gracia salvadora que transforma nuestra vida”.

¡Gracias, Nuestro DIOS

Por tu compañía que en nuestro caminar cotidiano tú nos das.

Por la alegría que a nuestro corazón brindas en el dulce trinar de las aves

Por la aurora que desvanece la noche más tormentosa

Por la paz que imprime tu presencia en la tempestad

Por la confianza que infundes en el estado más crítico de la enfermedad

Por el sostén que sentimos cuando nuestras fuerzas se acaban

Por tu dulce expresión: “No temas”, que disipa toda duda, angustia y preocupación

Por tu Amor, que excede a todo entendimiento, que aún siendo como somos, nos sigues diciendo: “Venid a mí”.

Por esto y por mucho más, te decimos, Hoy y Siempre:

¡G R A C I A S

A Ti, Nuestro DIOS, Nuestro SEÑOR, Nuestro SALVADOR.

Rev. Joel Velásquez Peralta

Pastor de la Iglesia Bautista de Roosevelt