La manifestación del amor de Jesucristo para los suyos es constante y firme.  En el presente Jesucristo se encuentra preparando moradas especiales para los Suyos.

“En la casa de mi Padre muchas moradas hay… voy, pues, a preparar lugar para vosotros”. (Juan 14:2)

Toda persona que haya puesto su fe en Jesucristo, le haya aceptado, como su salvador personal y le haya abierto su corazón para que more en Él, tiene su morada especial.  Esa morada especial no se adquiere con dinero “ni por obra para que nadie se gloríe”. (Efesios 2:9). 

Estas moradas especiales se distinguen porque en ellas la presencia de Jesucristo, nuestro Salvador, esta siempre presente, son eternas, “Dios enjugará toda lágrima… y ya no habrá muerte ni habrá mas llanto, ni clamor, ni dolor” ( Apoc. 21:4)

¿Le gustaría que Jesucristo le prepare una morada para usted?  Ponga su fe en Jesucristo como su salvador personal y entréguele su corazón, y entonces Jesucristo le preparará una morada especial.

Su hermana en Cristo,

Loida Hernández