Reflexiones Anteriores

 

EL ÚLTIMO SALTO

 

Ganó el derecho de representar a su país Inglaterra en los juegos olímpicos, en el salto del trampolín, una muchacha esbelta elegante y ágil, su nombre Tiffanie de veintidós años.

Una lesión en el brazo, la alejó de las competencias, luego sus padres se divorcian y esto la devasta.   Después su novio muere ahogado en el mar.

Un día no aguantó más y ensayó su último salto, pero no del trampolín sino del balcón de su apartamento en Sydney, Australia desde el piso 23 donde fue a vivir; poniendo fin su brillante carrera abrumada por la tristeza, depresión y la desesperanza.

Tiffanie olvidó que existe una fuente de vida, de fortaleza, de consuelo de amor y de paz, que se llama JESUCRISTO.

Lea atentamente: “Venid a MÍ = JESUCRISTO todos  los que estáis trabajados, (atribulados deprimidos) y cargados, (sin esperanza ni futuro)  y YO = JESUCRISTO – os haré descansar.”

No es una falacia es una verdad; solo JESUCRISTO puede hacer la diferencia.

Acuda a JESUCRISTO, su poder transformador hará en usted, la persona más feliz, segura y con un futuro prometedor.   Crea en JESUCRISTO como su Salvador, acéptelo en su corazón y sea salvo y feliz.

DIOS le bendiga.

 

Rev. Joel Velásquez Peralta

Pastor: Iglesia bautista de Roosevelt