En el mundo tan ajetreado y vertiginoso en que vivimos, la actitud de esperar es casi ausente y molestosa.  No nos gusta esperar por nada ni por nadie.  Deseamos que todo esté al instante, cual acción de un “click”.

Cuántos momentos gratos y maravillosos se han abortado por nuestra desesperación e impaciencia.  Estamos tan ocupados por vivir el hoy, el cada día; que perdemos la visión de un futuro prometedor y exitoso.

En este tiempo tan difícil en que estamos viviendo, el cual no afecta a algunos, sino a todos, hay palabras que nos deben mover a la acción de esperar; pero no una espera inerte, pasiva; sino de acción.  Lea con atención:

“Pero los que esperan a Jehová, tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como el águila…”.                              Isaías 40:31ª

Para alcanzar el fruto de la espera hay una acción: BUSQUE a DIOS con reverencia, humildad, reconociéndose necesitado, pero hágalo con genuino corazón.  Crea y acepte el único medio para llegar a DIOS, que es JESUCRISTO.  Reconózcalo como su Salvador y permita que en su vida se realice la hermosa transformación.

Acéptelo hoy mismo.

DIOS le bendiga,

Rev. Joel Velásquez Peralta

Pastor de la Iglesia Bautista de Roosevelt